| El Esclavo del Olvido | |
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| Mundo en el que tiene lugar | Tierra de Partida |
|---|---|
| Mundo en el que tiene lugar | Castillo del Olvido |
| Fecha de Inicio | 13 / 02 /2015 |
| Fecha de Finalización | ??? |
| GameMasters a Cargo | Sombra y Suzume Mizuno |
El día que todo cambió.
El día que, con paso firme, ganamos sabiduría por el camino.
El día que perdimos algo muy preciado;
el día que la oscuridad venció a la luz, y la luz a la oscuridad.
El día que el guardián resurgió.
El día que el demonio salió arrastrándose del abismo.
El día que luchamos contra nuestro destino.
El día que, con gran pesar y tristeza en nuestros corazones,
demostramos la voluntad para seguir adelante.
...
El día que despertaron
las memorias.Participantes[]
Ruta de los Perdidos[]
Ruta del Recuerdo Perdido[]
- Hana
- Neru
- Adam
- Saeko
- Aru Petrikov
- Kairi
- Nadhia Hoghes
Ruta del Caído[]
- Yui
- Nikolai
- Light Hikari
- Saxor
- Maya Zawrid
- Nicoxa Razor
- Malik
- Alec Ocus
- Colibritany
- Keiko
Sinopsis Inicial[]
El Ataque a Tierra de Partida[]
El Coloso, el sincorazón que atacó Tierra de Partida
Un sonido metálico resonó como un trueno en mitad de la noche, arrancando a los aprendices del reino de Morfeo. Durante unos instantes no hubo nada más excepto un silencio ensordecedor, como si toda Tierra de Partida, incluyendo los insectos, contuviera el aliento con el corazón en un puño. Y, entonces volvió a sonar una vez más. Y otra, y otra vez.
Al principio, si se asomaban por la ventana, no distinguirían nada a excepción de los árboles de los jardines, las figuras recortadas por la pálida luz de las estrellas y la luna…
Pero, con un nuevo gemido, captarían el movimiento de una de las pesadas cadenas. Se balanceaba y tensaba en el aire. Y, tras ella…
Una silueta humanoide, de al menos treinta metros de altura de ojos amarillos y cuernos que surgían de su cráneo, similares a los de un toro. Sus movimientos eran lentos, pesados, pero potentes. Sus inmensos brazos se cerraban en torno a la cadena con firmeza, con una decisión que les pondría los pelos de punta.
Y, en medio de su pecho, resaltaba un símbolo.
El de un Sincorazón.
De esta manera tan vertiginosa daba comienzo la misión de proteger Tierra de Partida del inmenso Sincorazón que asolaba el mundo. Los aprendices creerían que era una pesadilla, pero el griterío de los moguris y demás aprendices les demostraría lo contrario. Pronto, Ronin convocó una asamblea de urgencia e invocando a todos los aprendices en una de las salas más grandes para planear estrategias a efectuar contra el Coloso. Lamentablemente, los continuos ataques de la criatura no hicieron otra cosa salvo alterar a los aprendices, que miraban con horror como el monstruo arrancaba de cuajo una de las cadenas mágicas de Tierra de Partida, vitales para la supervivencia del mundo.
Mientras eso sucedía, Bastión Hueco preparaba a sus aprendices para iniciar una incursión al mundo, con el objetivo de aprovechar el ataque y acceder a la información que según Ryota, los maestros de Tierra de Partida ocultaban.
Tras una leve travesía, los miembros de Bastión Hueco llegaron a Tierra de Partida, donde fueron testigos de la desolación a la que se enfrentaban los Maestros y aprendices del bando de la luz. Sin embargo, Ronin cancela el hechizo con el que protegía la segunda cadena al darse cuenta de algo: Un sincorazón ha entrado en la zona más interna de Tierra de Partida. Intentando alcanzarle atravesando todo el vestíbulo con su propio glider, se ve incapaz de llegar a tiempo. Pocos segundos después, una explosión dentro del castillo alcanza el lugar y a todas los aprendices que estaban afuera...
Para cuando se despiertan, Tierra de Partida ha desaparecido, y en su lugar ahora hay una terrorífica y demoníaca fortaleza, cuya estructura retorcida sólo era iluminada por la oscuridad que rodeaba ahora el mundo. Había surgido el Castillo del Olvido.
El Castillo del Olvido[]
Tras la desaparición de Tierra de Partida, los aprendices de Tierra de Partida recibieron la orden de permitir el paso a Bastión Hueco a la misteriosa fortaleza de color caqui. Bastión Hueco, corriendo a través del extraño corredor pétreo que había surgido ante la imponente estructura, no tardaron en entrar, tras lo que los Maestros erigieron un hechizo para evitar que los sincorazón lograran entrar.
En el interior se encontraron un pasillo de mármol, el cuál estaba ricamente decorado con una serie de columnas y pequeñas estatuas florales. Lo que más llamaría la atención sería un gigantesco portón dorado, del cuál colgaba una cerradura dorada y una serie de cadenas encantadas.
Los Maestros aprovecharon la situación para explicar qué era exactamente el Castillo del Olvido:
—
"Seguimos en Tierra de Partida, sólo que… De una forma… Diferente. Es la otra cara de nuestro mundo, una que no conocemos y que sólo sale a la luz cuando el corazón del mundo está en peligro.
—La mirada del hombre se dirigió hacia el candado cubierto de cadenas—
. Tenemos que organizarnos y devolver el castillo a la normalidad. Pero para eso necesitamos a Ronin. Debemos encontrarlo, tiene que estar en algún lugar de este lugar."
Al poco rato, un misterioso encapuchado, cuya vestimenta impedía saber si se trataba de un hombre o una mujer, hizo aparición bajo el nombre "El Guía". Éste les explico que el Castillo estaba maldito, preparado para poner a prueba a todo aquel que osara entrar a su interior. Además, les explicó que para devolver el mundo a su forma natural, deberían de conseguir las dos mitades de una llave legendaria que únicamente serviría para abrir la puerta con el candado dorado. Una mitad se encontraría en los pisos más superiores de la deforme fortaleza, mientras que otra podría ser hallada en los sótanos más profundos y oscuros de aquella tierra maldita.
Sin embargo, los Maestros sabían que por mucho que recuperaran la Tierra de Partida original, sin su debida protección volvería a caer ante los sincorazón. Y sólo había dos personas capaz de hacer eso: Ronin y el Antiguo maestro Zephyr. Sabiendo esto, y aprovechando su poder en el corazón del mundo, Chihiro crea un portal a través del tiempo, a la Tierra de Partida de hace 1000 años. Su objetivo es que mientras unos busquen las mitades de la llave, otros puedan ir a buscar a Zephyr al pasado. Poco a poco, Maestros y aprendices quedan divididos y agrupados para repartirse los objetivos. Ante la situación, Ryota junto a varios aprendices, cómo Ragun y Fátima, deciden quedarse en las puertas protegiendo al resto del castillo de los sincorazón.
Rutas[]
Ruta del Caído[]
Kazuki y Chihiro, acompañados por los aprendices Yui, Nikolai, Light Hikari, Saxor, Maya Zawrid, Nicoxa Razor, Malik, Alec Ocus y Colibritany, comienzan a descender las escaleras a los sótanos del Castillo del Olvido, ansiosos por conseguir la otra mitad de la llave milenaria.
Al bajar y abrir su puerta, no tarían no sólo que habían quedado encerrados allí, sino que no estaban sólos. En el centro de la sala que se habrí ante ellos, se hallaba un hombre de avanzada edad sentado en una simple de ruedas, custodiado por dos imponentes Caballeros de la LLave Espada, o eso debían de ser al llevar dos formidables armaduras y una Llave espada muy particular en sus mano, con un corazón atrapado en cadenas en su interior.
¡Bienvenidos al Castillo del Olvido!
—Sonrió el viejo. Su expresión, hasta entonces afilada y calculadora, se suavizó hasta volverse serena, casi amable—. Todos estamos al tanto de vuestra situación y me encantaría invitaros a tomar algo para que cogierais fuerzas, pues me imagino que muchos no habéis ni tenido tiempo para desayunar, pero me temo que es imposible. Me imagino que tenéis mucha prisa.
¿Quién eres?
—enarcó una ceja el Maestro. Tras examinar las Llave Espada de los portadores, meneó la cabeza—. Rectifico. ¿Quiénes sois?
Nicolae Jasper, joven. O eso se supone.
—Bajó la vista, ¿entristecido? No respondió del todo la pregunta de Kazuki—. Ah, siempre es interesante conocer nuevas personas, expande tus horizontes. Pero me trae aquí una labor diferente: he de poneros a prueba.
—Se aclaró la garganta—. Veréis, para avanzar en este Castillo se necesita un corazón fuerte. Hay… quienes no querrían veros aquí. Y cada piso será más duro, ¿me explico?
El anciano les explicó entonces su particular función en el Castillo: Advertirles de que necesitarán convicción y temperamento para lograr sus objetivos. Quizas llegarían a bajar infinitos pisos, o quizás sólo uno. Todo dependía del poder de su corazón... Y su primera decisión consistiría en esperar en esa sala o avanzar a la siguiente...
El grupo de dividió, y sólo cuatro de ellos decidieron esperar en la estancia, aprovechando la situación para acribillar a Jasper con más preguntas.Los que decidieron seguir a Kazuki y a Chihiro se encontraron un inmenso pasillo blanco, que no parecía tener final. Tras un paseo, atravesaron la única puerta que pudieron abrir, acabando en la misma sala de antes... que estaba ensagrentada.
Kazuki, colérico, arremetió contra Nikolae con toda su furia. Lamentablemente, antes de que pudiera alcanzarle las dos gigantescas armaduras y sus llaves espadas acabaron lanzando a Kazuki unos metros atrás del resto de los aprendices. Era hora de luchar.
—
Bienvenidos una vez más, Portadores. ¡Esta es la verdadera prueba!
—Nicolae levantó ambos brazos apuntando al techo y emitió una risa macabra—
. Luchad: Si ganáis todos pasaréis, si perdéis todos moriréis. A menos que sacrifiquéis a la mitad de vuestros compañeros y pasad el resto. ¡Escoged!
—
¡No vamos a aceptar ese trato!
—gritó Kazuki a pleno pulmón—.
¡Lucharemos contra vosotros!
Mientras, aquellos que se habían quedado junto a Jasper y habían bajado las escaleras antes de que vinieran sus compañeros de nuevo, acabaron en una sala hexagonal, con una de sus puertas selladas. En el centro de la sala, verían una serie de cartas, naipes para ser exactos. Cuatro naipes, uno para cada aprendiz que había superado la prueba...
Ruta de los Perdidos[]
Nanashi, acompañada por Bavol Trené, Simbad, Gata, Enok, Freya, Hiro, Lyon y Saito, comenzó a subir las escaleras hacia la cúspide del Castillo del Olvido. Tras subir, se encontraron en un pasillo de mármol, parecido al de la entrada, pero con tres caminos de lo más variopintos. A la izquierda, el pasillo torcía a la derecha, impidiendo ver que habría. A la derecha, el pasillo comenzaba a girar sobre sí mismo, volviendo dificil si no imposible saber que habría. Y justo delante del grupo, una pequeña escalera que llevaba a una puerta dorada, no tan ostentosa como el de la entrada.
Nanashi, sin perder un instante, subió las escaleras e intentó abrir la puerta, pero lo único que recibió fueron burlas del enigmático Guía del Castillo.
—
Organicémonos
—se dirigió exclusivamente a los miembros de Bastión Hueco, como si los de Tierra de Partida no existieran—.
Iré por la izquierda. Vosotros podéis ir por donde prefiráis, pero recordad que debéis ir como mínimo en parejas para protegeros de posibles peligros. No sabemos qué puede haber más adelante.
—Buen consejo. Y como soy una buena persona, os daré un pequeño adelanto. —Casi pudieron percibir la sonrisa del Guía—. El camino de la izquierda lleva a una prueba, a una que no podréis superar puesto que sólo alguien verdaderamente leal a su Orden sería capaz de aceptarla. —Volvió la cabeza hacia Saito y Bavol—. Y me temo que ninguno de vosotros tiene lo que necesita… ¿Cierto?
Sin más, desapareció, dejando la oportunidad de elegir a los extrañados aprendices.
Al no poder abrir la puerta que tenían delante, Nanashi y varios aprendices se dirigieron a la ziquierda, mientras otros aprendices se fueron a través del extraño pasillo.
El grupo de Nanashi, tras un paseo girando a través de los pasillos, llegó a una sala circular decorada con una serie de jarrones. Allí, el encapuchado volvía a esperarles. Allí, el Guía les explicó en que consistía la prueba: A renunciar a su LLave Espada.
—
¿Disculpa?
—¡Has entendido a la perfección lo que he dicho! —replicó el Guía, sacudiendo un índice y chasqueando la lengua—. Es el precio justo por uno de estos…
Entre sus manos hizo aparecer una serie de extrañas cartas, las cuáles se asemejaban a las que sus compañeros de los sótanos habían obtenido. El Guía explicó que los naipes funcionaban como llaves a través de todo el Castillo, permitiéndoles atravesar puertas que tenían el acceso vetado. Algo escéptica, Nanashi accedió al trato y perdió su poder sobre la LLave Espada, quedando ligeramente aturdida al instante y cayendo al suelo.
Mientras la pobre maestra se levantaba, el espectro comenzó a indagar en el corazón de los presentes, presionándolos para que eligieran que harían ahora. ¿Sacrificarían la Llave Espada o se la quedarían bajo la amenaza de no poder avanzar?
El otro grupo, con tan sólo cuatro aprendices y aquellos que abandonaran la sala circular, lograron atravesar el pasillo de la derecha sin problemas, debido a que el castillo carecía de las leyes de la física. Tras eso, les esperaba un largo pasillo que ascendía y ascendía en la oscuridad. A medida que subían, comenzaron a oír toda clase de murmullos, gritos y súplicas provenientes de la oscuridad. Pero lo peor sería cuando de estas figuras comenzaron a surgir manos lastimosas, tratando de traer a los aprendices a la oscuridad...
Ruta del Recuerdo Perdido[]
Dispuestos a encontrar a Zephyr en el pasado, Diana Thorn, La Maestra Lyn, Hana, Neru, Adam, Saeko, Aru Petrikov, Kairi y Nadhia Hoghes , atravesaron el portal creado por Chihiro, llegando en cuestión de minutos a la Tierra de Partida de hace 1000 años.
Al aparecer en un callejón, vieron la gigantesca ciudad que se levantaba en la época, en la falda de la montaña que algún día acogería la fortaleza de Tierra de Partida. A poco de hacerse idea de en qué lugar estaban, comenzarían a oír gritos y jaleo proveniente de la plaza del pueblo. Al llegar, se darían cuenta de lo mucho que habían cambiado las cosas: niños y ancianos corriendo de un lado a otro, el ganado acompañado hacia laszonas seguras... y el increíble fuego que se habría paso desde las murallas al exterior. Tierra de Partida estaba siendo asediada.
Lo que más llamaría la atención de los aprendices fue el ver que no estaban sólos allí, pues más Caballeros de la Llave Espada comenzabana a salir a la batalla, portando cada grupo un símbolo característico, divididos por animales. Oso, Serpiente y Zorro.
—
¡Permaneced en la retaguardia! ¡Recordad, nuestro deber es impedir que más gente muera! ¡Y estad atentos a las señales de luz! ¡Marchad en pequeños grupos para poder desplazaros con facilidad, así no llamaréis la atención de los Sincorazón!
Sin esperar un segundo, Diana Thorn y Lyn se dirigieron a ayudar a las murallas y a las puertas, respectivamente. Era hora de decidir.
—
¡Gracias! ¡Necesitamos todas las manos posibles! ¡No olvidéis retiraros hasta nuestra altura para que os curemos o reforcemos!
—
¡Es nuestro deber mi señora!
Nadhia, Neru, Saeko y Kairi avanzaron tras las formaciones de los Caballeros de los Clanes, en dirección a la puerta. Y una vez se abrió conocieron el verdadero infierno. Una verdadera ola de oscuridad avanzaba sin pausa hacia la puerta, ostigando a todos los que estaban allí. Pero lo peor vino poco después, cuando varios escorpiones del tamaño de las casas de la ciudad comenzaron a hacer aparición. Lyn, que había detectado también a un grupo de peligrosos sincorazón, Invencibles, que la obligaron a atraer a uno a la retaguardia. La batalla en las puertas comenzaba, y el apoyo en las murallas había sido silenciado ¿Porqué?
Para cuando Hana y Diana llegaron a lo alto de las murallas, se encontraron con una serie de monstruos arácnidos, que lograron dejar a Diana colgando de una de las almenas al intentar salvar a una caballero que había sido lanzada por los aires.
En el pueblo, mientras, Adam se limitó a buscar a Zephyr, aunque debido a lo vistoso que era se llevó más de una reprimenda. Para variar, varios sincorazón aparecieron y le obligaron a luchar, a base de hostias como sólo él podía hacer.
Otros Datos[]
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